Los aficionados que, puestos en pie, aplaudíamos agradecidos despidiendo a Michel Portal, en el Parque “El Majuelo” de Almuñécar, el pasado sábado, sabíamos que habíamos asistido a un concierto memorable. El veterano clarinetista francés fue desgranando las composiciones incluidas en su último trabajo discográfico “MP 85”, que hace referencia a sus iniciales y a su edad, que grabó en plena pandemia y confinamiento en el 2.020. Portal que en noviembre cumplirá los 87, derrochó lirismo, originalidad, modernidad, creatividad y capacidad expresiva tanto cuando con el bajo clarinete hacía uso de los sonidos más graves y melódicos, como cuando arrancaba con el soprano los sonidos más agudos. En definitiva, puso de manifiesto, con un vigor increíble, las cualidades que han convertido a este virtuoso del clarinete especialista en interpretar a Mozart, Brahms, Schumann, Berg y apóstol del free jazz europeo en la leyenda viva de la música que es. Su obra es universal, y además del territorio de los clásicos, ahonda en las raíces de la música africana, cubana, centroeuropea, y, por supuesto del folklore del País Vasco, del que es un profundo conocedor y admirador, ya que nació en Bayona El último tema que os propongo “Euskal Chant” que es pura belleza, es una muestra de ello.
El azar quiso que coincidiéramos en el mismo hotel y que esta mañana nos encontráramos en la recepción. Tuvimos así la ocasión de intercambiar unas palabras y sobre todo, de agradecerle la maravilla de concierto que nos había obsequiado la noche anterior. Con humildad y simpatía nos correspondía sonriendo, al tiempo que decía que se había sentido muy bien.
Muchas gracias. Alucinante