El veterano bandoneista volvió a subirse el año pasado a los escenarios, tras la pandemia, a los 87 años. Hijo y padre de músicos. Su padre, Cayetano que fue un reputado compositor, e intérprete de zambas carperas, variante de la zamba clásica de ritmo más rápido, inculcó a sus hijos la pasión por ese instrumento. De ahí salieron, nuestro protagonista y Celso, también bandoneista. José María, hijo de Dino es guitarrista y también le da a la percusión.
Dino Saluzzi está considerado como uno de los mejores bandoneistas del mundo hasta el punto de que buena parte de la crítica lo sitúa a la misma altura que Piazolla.
Saluzzi es un heterodoxo, desconstruye las formas tradicionales del folklore argentino y del tango, y las hace pasar por otros géneros como la música barroca, el sinfonismo, la música contemporánea y el jazz.
El importante sello discográfico ECM lo define como “un gran narrador de gran sutileza que reflexiona sobre el paso fugaz del tiempo”. Pues vale.
Os propongo la escucha de cuatro temas, el primero de ellos, el conocidísimo “Alfonsina y el mar”, el cuarto “Mojotoro” abre el disco del mismo nombre, a través del cual el arriba firmante descubrió a Saluzzi. Me gusta especialmente. “Mojotoro “ es el nombre de un río de la provincia argentina de Salta, cuna del bandoneista.