Noviembre se asocia, entre los aficionados al género, a jazz, porque es el mes, junto al de julio, en el que se programan festivales de jazz en varios puntos de España.
En Málaga es el pianista Fred Hersch (ver su entrada en el blog, si os place), el encargado de abrir el telón el día 2 de noviembre, en un concierto en solitario en el que presentará su último trabajo “Silent, listening”, segundo álbum que ha grabado con ECM., que he escuchado y me ha gustado. No es que Hersch sea la “alegría de la huerta”, pero sus composiciones tienen la capacidad de transmitir historias, posee una gran capacidad de improvisación y espero que no defraude. Lo he visto en varias ocasiones y siempre salí satisfecho de sus conciertos.
El día 3 de noviembre tendremos la ocasión de oír de nuevo a tres veteranos del jazz flamenco, tal vez el trío por excelencia de esta modalidad, Benavent, Tino de Geraldo y Jorge Pardo. O Pardo, Benavent, Tino de Geraldo, el orden de los factores no altera un producto, que no por conocido, deja de resultar atrayente. Además en el jazz, no hay dos conciertos iguales y los tres maestros, aunque traten de revivir el mítico concierto de Sevilla seguro que le darán un aire nuevo.
El día 4 de noviembre se presenta lo que han dado en llamar “La edad de oro del Jazz Español” y subirán al escenario tres formaciones distintas de músicos de la escena del jazz patrio, al que ya podríamos llamar veteranos. Cierto es que el panorama jazzístico español atraviesa un gran momento, porque el jazz, no sabría identificar por qué, se ha puesto de moda y eso es causa y efecto de que gocen de más oportunidades los músicos, de lo cual me alegro un montón. Pero ello no puede hacernos olvidar de aquellos otros más veteranos que han luchado y mucho por esta música, en condiciones más difíciles, y de los que aquellos más jóvenes son, sin duda, deudores.
(Continuará).